viernes, 30 de abril de 2010

A Luis Sánchez Rodríguez,
compañero de fatigas.


¿Será función del conserje o del bedel
pulsar el botón que abre una puerta?
Nadie sabe o conoce la respuesta
ni se atreve a emitir un suponer.

La profunda dimensión de estos dilemas
y de otros de factura semejante
riza el rizo más rizado y el talante
de aquel que ha de lidiar con estos temas.

¿Son precisos los juicios de un ulema
para ver claridad en tanta bruma,
o insistir, en el fondo, es anatema?

Asuntos que parecen insondables.
Metafísica podrida que perfuma
las horas de los días laborables.


2 comentarios:

lusaro dijo...

Bueno, me confundí "de sitio"... es que los ordenadores y yo... ya sabes... jeje...

Joaquín Paredes Solís dijo...

Claro, y has ido a comentárselo al gaitero. Je, je...