sábado, 27 de octubre de 2012

POBREZA





Afirma Martha C. Nussbaum, Premio Príncipe de Asturias de Ciencias Sociales 2012, que “la pobreza mata las aspiraciones y te quita las ganas de vivir”. Esta profesora de Derecho y Ética en la Universidad de Chicago, reconocida como una de las grandes pensadoras actuales, cuenta en una entrevista que le realiza Lola Galán el día 13 de octubre en El País que “una de las cosas que me abrió los ojos a la realidad fue un viaje de intercambio estudiantil que hice, un verano, en el que estuve viviendo con una familia obrera, en Swansea, en el sur de Gales. Aprendí lo que es de verdad vivir en la pobreza. No me pareció ni romántico ni atractivo.”.
La pobreza, efectivamente, es uno de los males que amenazan nuestro tiempo, devora el porvenir e impide que los sueños prosperen e, incluso, constriñe y opaca el futuro de aquellos que no pueden aspirar más que a sobrevivir dentro de los límites de su propia miseria, impidiéndoles la libertad de movimientos y de formación.
La pobreza, como la ignorancia, lastra las horas de aquellos cuyo horizonte no tiene otra esperanza que un día a día que se agota en su propia ceguera, en su propia oquedad; ambas oprimen el corazón, la garganta y la mente de aquellos en los que se instala, como una rémora, condenándolos  al ostracismo de su propio ser, impidiéndoles incluso la huida de su particular condición, cerrándoles las fronteras de toda prosperidad, encerrándolos en las cárceles de sus propios miedos, inopias y sumisiones, sin expectativas ni créditos que les liberen de esas tinieblas, tan persistentes como sus carencias.
La vida, prisionera así entre los barrotes de estas coordenadas, pierde convicciones y perspectivas y se anega en los pantanos de sus privaciones y penurias, hipotecándose cada vez más en las arenas movedizas de su desesperación.
Pero estas condiciones no son producto de una evolución natural de las cosas, sino  consecuencia de un desarrollo desigual, caprichoso y mal entendido de las sociedades humanas y de su organización política y económica; de un reparto injusto o de apropiaciones indebidas, y en ocasiones violentas o fraudulentas, de los recursos y las riquezas que son de todos y que, por ende, podrían paliar esas míseras condiciones de vida en la que se encuentra gran parte de la población del planeta.
Esta situación, provocada en gran por la avaricia egoísta y el afán desmedido de poder, ejemplifica también el fracaso de la humanidad en la construcción de un mundo más habitable, menos injusto en el reparto de los recursos, menos crispado en sus carreras por el éxito, el dinero o la posición a cualquier precio, y más atento a lo que debería ser esa habitabilidad pacífica, encaminada al conocimiento del mundo en que vivimos y al intercambio de la información resultante, con el objeto de que la humanidad y el respeto al mundo en que vivimos, sean siempre fines y no medios para conseguir esos otros objetivos bastardos que no hacen sino sumirnos en la miseria y la infelicidad más infames y ruines, restando posibilidades a nuestras esperanzas de progreso.
En esa definición y diseño de un nuevo proyecto de convivencia mundial habrá que abandonar viejos esquemas medievales, tecnócratas y economicistas y a mirar la realidad y a nosotros mismos de otra manera.
Y acabo con palabras de Martha Craven Nussbaum en la misma entrevista, para la que habría que retomar los estudios humanísticos, que, según ella, son básicos para cimentar un saludable sistema democrático: “Son materias que nos aportan información sobre el mundo en que vivimos”. De entre estas materia destaca a la filosofía, porque “como ya lo vio Sócrates, la filosofía tiene una capacidad única para producir una vida examinada, es una fuente de razonamientos y de intercambios de argumentos. Nuestro clima político actual es histérico, dado a las invectivas más que a los argumentos. Necesitamos de la filosofía con la misma urgencia que la Atenas de Sócrates”.
Y nuestra Atenas actual se ha globalizado tanto que abarca el mundo entero. La tarea no es fácil.





domingo, 21 de octubre de 2012

PERPLEJIDAD






Con qué facilidad y prontitud llega todo tipo de armas a cualquier rincón del planeta para enfrentamientos y guerras y con cuántas dificultades y dilaciones tropiezan las distintas ayudas humanitarias para llegar a su objetivo y paliar las calamidades o las hambrunas.




domingo, 14 de octubre de 2012

NACIONALISMOS






Hace tiempo que estoy convencido de que los nacionalismos son rémoras que no sirven más que para llenar de enfrentamientos y odios la convivencia. Las banderas y los himnos, las creencias, la lengua y las tradiciones comunes se utilizan sin escrúpulos por unos cuantos con oscuros propósitos identitarios que no tienen otra finalidad que separar y excluir y de paso encumbrarles a ellos a los puestos de honor y de poder que persiguen.
Pertenecer a un territorio es algo totalmente fortuito que forma parte de la existencia azarosa de los individuos; no es una marca genética ni un factor sanguíneo ni una señal inmutable y sagrada que distingue y diferencia a unos individuos de otros de manera nítida e inconfundible y para siempre.
Las diferencias entre los seres humanos no son naturales, sino ideológicas, económicas, sociales o políticas, producidas por el devenir de su propia historia, por las circunstancias y avatares de las vivencias que poco a poco han ido produciendo desigualdades e injusticias en el seno de las propias comunidades humanas, diferencias debidas sobre todo a las acciones y a los discursos interesados de aquellos que vieron en la defensa de esas discrepancias un modo de medrar a costa de la ingenuidad, del miedo y de la ignorancia de la gran mayoría.
En un mundo que se ha hecho pequeño y casi irrespirable y en el que durante mucho tiempo se luchó por eliminar las fronteras que no hacían sino separar de forma artificial y violenta personas y territorios, no parecen tener mucho sentido el que algunos se empeñen en seguir fabricando fronteras y muros en base a estereotipos e idiosincrasias que son más bien producto de sus propios delirios o el fruto ocasional de las circunstancias y de los accidentes, más que verdaderas categorías definitorias de lo que es un ser humano.



viernes, 12 de octubre de 2012

AFRODITA 55


MAGNÍFICA CARGA






Calificar de “magnífica” una carga policial contra una manifestación, o es un desconocimiento del lenguaje y su conexión con la realidad de los acontecimientos, o es la consecuencia de la ideología que subyace en el interior de cada cual y que muestra quiénes somos y cómo pensamos, incluso a veces de manera no intencionada, como una trampa del inconsciente. Si la afirmación procede de un Ministro del Interior, produce escalofríos.



domingo, 7 de octubre de 2012

NOS DIJO UN DÍA (RIPIOS)





Nos dijo un día un gallego
que se llamaba Rajoy,
estando en la oposición,
que el secreto de la crisis,
también de su solución,
lo tenía bien guardado
en el fondo de un cajón.
Nada de subir el IVA,
ese impuesto facilón,
ni de tocar las pensiones,
la salud, la educación…

Estaban las elecciones
a punto de caramelo,
y tanto Rajoy rajó
a cuenta de Zapatero
y de toda su gestión,
que se llevó sin problemas
los votos de la nación
a las urnas de PP,
como todo un campeón,
con xu xilbido de siempre
como bandera y pendón.

Mas cuando fue presidente
y dueño ya del sillón,
empezaron las promesas
a olvidarse en su cajón.
Donde dije digo, digo Diego,
y se afiló las tijeras.
Y en menos que canta un gallo
nos dejó tan trasquilados
y con tan poco vellón,
que apenas tenemos fuerzas
para morirnos de frío
al lado de un radiador
que tenemos apagado,
para ahorrar calefacción.


Creció la prima de riesgo,
el paro, la deuda… Adiós
a la paga de Navidad:
no tomaremos turrón
ni beberemos champán,
y de la cuesta de enero
no me apetece ni hablar.
Y lo peor de este aguacero
es que no quiere escampar
hasta que el agua nos cubra
el velo del paladar
y nos deje a la intemperie
desnudos, sin un real.

Ahora no, más tarde, luego…
¡Qué dudas con el rescate!
Quizás es que los gallegos
dudan por obligación
cuando están en el gobierno,
no tanto en la oposición;
quizás porque ahora actúan
al dictado de otro señor
que tiene dientes de lobby
y apetito de predador
y quiere zamparse vivos
los sueños de los que no
quieren conformarse
con ir de mal en peor.



AFORISMOS 45




La caridad, la beneficencia y la limosna producen servilismo y sumisión; la solidaridad y los derechos cimentan ciudadanos libres.