Polonia inundada. El Oder y el Vístula, los grandes ríos polacos, anegan las tierras y se cobran vidas. Naturaleza desatada. Como el volcán bajo el glaciar Eyjafjalla, en Islandia, que mantuvo en jaque el espacio aéreo europeo durante varios días. Ahora, en algún lugar en ese caos de agua nos aguarda Przemysl, una ciudad polaca de aproximadamente 67.000 habitantes que fue en tiempos una ciudad fortificada cerca de la frontera con Ucrania. Una ciudad que para mí no existía hasta hace poco tiempo, en que escuché por primera vez su nombre casi impronunciable.
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